Las religiosas del Instituto de la Bienaventurada Virgen María (IBVM) queremos dar a conocer la realidad del Instituto en todo el mundo. Y para ello, queremos presentaros las historias de vida y vocación de diversas mujeres, religiosas del IBVM-Loreto, repartidas por los cinco continentes. Historias que nos llegan desde India, Albania, Kenia, Canadá o España, entre otros países, y en las que las religiosas se han atrevido a contarnos cómo surgió su vocación, por qué eligieron a Mary Ward, qué les impulsa a seguir aquí y cómo trabajan para hacer realidad las Llamadas de nuestra última Congregación General y los postulados de Mary Ward.
Hoy traemos a una religiosa que, para la mayoría, no necesita presentación. Es Flora Magro y quien la conoce, sabe que sobran las palabras que podamos decir de ella. Una mujer que deja huella allá por donde pasa, que no pierde la sonrisa ni en la situaciones más difíciles y que mantiene grandes amistades de todos los lugares en los que ha vivido.
En el vídeo nos cuenta cómo fue su despertar religioso, "una niña siempre alegre deseosa de ayudar a los demás", por qué entró en el Instituto y, sobre todo, por qué sigue en él. "No cambiaría mi vida por nada del mundo"